Padres Hoy

Razones para limitar el uso de pantallas en los niños

Educación

 

A los niños de hoy se les llama nativos tecnológicos, muchos saben usar los dispositivos mejor que nosotros. Sin embargo los niños de hoy quizás juegan menos, se aburren más, son más sedentarios y menos creativos. No te proponemos que les prohíban el uso de pantallas y dispositivos ya que a través de su uso también logran un desarrollo de otras herramientas intelectuales. Recomendamos que busques un balance y que puedan encontrarle el gusto y disfrute a los dos mundos ya que uno puede complementar al otro.

1. Si vas a permitir el uso de tablets y computadoras o celulares, intenta que sea usando un juego que los inspire a crear y construir mundos o en los que aprendan jugando. Evita las aplicaciones o juegos que los conviertan en receptores pasivos.

2. Limita el uso para que no caigan en la necesidad constante de estímulos: en la vida real las cosas no suceden tan rápido. Intercala los juegos online con juegos analógicos que ayuden a construir la paciencia, que les enseñen a vivir disfrutando el proceso sin buscar resultados inmediatos.

3. El exceso de información en poco tiempo genera ansiedad y estrés: estímulos muy rápidos y constantes saturan sus sentidos,

4. Excesiva información y dificultad o incapacidad para procesarla: no podemos controlar absolutamente toda la información o estímulos que les llegan a través de las pantallas y en algunos casos esa información no es relevante, no es adecuada o necesaria para ellos pero ocupa espacio dentro de sus cabezas. Busca filtros que frenen el acceso a contenido inapropiado y espacios seguros.

5. Sedentarismo: delante de una pantalla perdemos totalmente la noción del tiempo, los niños no deben pasar su tiempo libre consumiendo pasivamente información, deberían tener actividad física y mental, cuanto más juega y más se mueve un niño mejor es su rendimiento, su desarrollo. El ejercicio físico les ayuda a gestionar y disminuir el estrés, segregar serotonina y aumentar su bienestar.

6. Dificultad para concentrarse. Una vez más el exceso de estímulos, la saturación a la que están sometidos genera un mayor grado de excitación, y todos sabemos que cuando un niño esta excitado o alterado difícilmente puede concentrarse y más si las actividades en las que debe hacerlo carecen de ese tipo de estímulos y atractivo fácil.

7. Disminuye la comunicación: el tiempo que pasamos frente a una pantalla lo "robamos" a estar con nuestros hijos y nuestros hijos con nosotros. Los niños necesitan que los adultos estemos de manera consciente, no controlando cada poco el correo, los wathsapps o las actualizaciones de Facebook o Instagram. Si los sentamos frente a una pantalla nos perdemos momentos valiosos de compartir experiencias, de hablar sobre lo que nos pasa, nos gusta, soñamos... en definitiva de convivir.

 

Cualquier duda por favor consulta con tu médico.